El Derecho Civil es el conjunto de normas y principios encargados de velar por el desarrollo de las relaciones entre las personas, y también entre éstas y el Estado. Las personas que comprende el alcance del derecho civil pueden ser tanto físicas como jurídicas, y sus relaciones pueden ser personales o patrimoniales.
El fin del Derecho Civil es mantener un trato cordial entre las personas, inculcar valores en la sociedad y educarla. Por ello, sus resoluciones son de carácter ético.
En Argentina se sancionó una reforma al Código Civil y Comercial en el año 2015, la cual unificó ambas ramas del derecho e incorporó varias cuestiones fundamentales que no estaban comprendidas en los antiguos códigos decimonónicos. Se incorporaron, junto a los derechos patrimoniales, el derecho a la intimidad, honor, imagen e identidad. Además, se abarcaron normas referidas a los derechos colectivos.
Debido a la gran extensión del Código que comprende el Derecho Civil y Comercial resulta imposible detallarlo en un artículo abreviado. Pero es conveniente estar informado, aunque sea a muy grandes rasgos, sobre su alcance.
Entonces, si hacemos una lista sobre la trascendencia del Derecho Civil podemos decir que comprende: el derecho de familia, el cual regula las consecuencias de las relaciones de familia, tanto por matrimonio como por parentesco; el derecho de las personas que se encarga de normalizar las capacidades jurídicas de las personas naturales, las características de la personalidad y los derechos personalísimos.
Asimismo, el Derecho Civil engloba el derecho de sucesiones, es decir, del traspaso de bienes y derechos de una persona fallecida a terceros. Además, el derecho a bienes, o sea a la posesión de cosas materiales y a la propiedad privada. El derecho a la responsabilidad civil, lo cual hace referencia a la indemnización por daños y perjuicios ocasionados a otra persona.
Este es un panorama general sobre el Derecho Civil ya que es necesario aunque sea un mínimo conocimiento de este para desenvolverse mejor en la sociedad y hacer valer nuestros derechos. Para llegar a buen puerto en cuestiones que involucren este tipo de derecho es necesario acudir a un abogado especializado en civil ya que es una rama muy extensa.